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¿Tu hijo tiene sobrepeso? Consejos para resolver el problema

17 marzo, 2017

En primer lugar es importante para determinar con certeza si tu hijo tiene sobrepeso o simplemente es ligeramente más gordo que los otros niños. Esto sólo puede hacerse a través de la observación continua por el pediatra, y un correcto control de IMC.

Ver: como calcular el imc facilmente

Una vez que haya determinado que existe un exceso de peso, es importante mencionar que  gran parte de la responsabilidad será tuya para ayudar a tu hijo a crear una relación sana con los alimentos y lograr el control de peso de manera positiva, con cambios en las actividades diarias y los hábitos alimenticios.

No hay que olvidar también que los padres son los modelos más grandes de cualquier niño. Si el ambiente en el hogar es con personas físicamente activas y que se alimenta canamente, los niños estará observando y copiando los mismos comportamientos.

La comida no es el problema

Cada vez es más común que los niños muy pequeños pasan una gran cantidad de tiempo frente a la televisión u otro dispositivo electrónico, esto representa menor gasto de energía y aumento de peso. Esto edebe ser cambiado. En general, los niños no están a dieta.

La restricción de alimentos para los niños causa más problemas que soluciones. Hay niños que terminan comiendo a escondidas e incluso más porciones cuando están en otro lugar.

Lo que debería ser restringido son aquellos productos menormente nutritivos tales como galletas rellenas, snacks de paquete, fideos instantáneos, jugos artificiales y chocolate con leche.

Exponer a tu hijo a alimentos saludables y aumentar el nivel de actividad física, es la clave para solucionar el problema de una manera sana.

¿Cómo enseñar a un niño a comer alimentos saludables?

Te dejaremos una serie de sugerencias para ayudar a mejorar la dieta de tu hijo y despertar su interés en los alimentos más nutritivos y bajos en calorías.

Eliminar del menú de la familia, en la medida de lo posible, los hidratos de carbono refinados, tales como papas fritas, pan y arroz blanco, cereales con azúcar,etc.

Puedes reemplazarlos con arroz, cereales y panes integrales y reducir la cantidad. Trata de tener en casa  opciones de bocadillos saludables como zanahorias, tomates cherry, uvas, manzanas o plátanos en rodajas, queso en trozos pequeños, yogur natural.

Siempre debes proporcionar agua para que beba tu hijo, y convertirlo en un hábito. Evita los jugos artificiales y refrescos; además que siempre es mejor comer la fruta completa a optar únicamente por el jugo.

No obligues a tu niño a comer si no quiere y no le obligues a terminar todo lo que pones en el plato. Es importante no interferir con la capacidad natural de regular el apetito. Ayuda a tu hijo a comer cuando tiene hambre y que deje de comer cuando se siente satisfecho.

Esencial es limitar al mínimo la comida chatarra como el pollo empanizado de comidas rápidas, hamburguesa, papas fritas, helados, etc. Estos alimentos son los más grandes villanos de la ganancia de peso.

Recuerda que la mejor manera de ayudar a tu hijo es encaminarlo a la participación en actividades físicas placenteras y proporcionar un alimento delicioso y nutritivo en casa. En caso de duda sobre el peso, habla con su pediatra. No adoptes medidas extremas, como poner a tu hijo a dieta sin orientación médica.